El barranco de las Almunias. El más importante barranco estepario de Zaragoza
Uno de los relieves más característicos del término municipal de Zaragoza es la intrincada red de barrancos que, surgiendo de las planas o muelas de la zona, culminan en los valles de los ríos principales.
Uno de estos barrancos es el barranco de Las Almunias, uno de los más conocidos por senderistas y naturalistas de Zaragoza, catalogado como Lugar de Importacia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Inicia su desarrollo en los márgenes de La Plana y continúa abriéndose durante más de 10 kilómetros, drenando una superficie de 1002 hectáreas, hasta desembocar en los campos de la margen derecha del río Huerva, entre las localidades de Cadrete y Santa Fe.
Flora y fauna
En las zonas más altas, cercanas a La Plana, se extiende un típico bosque mediterráneo, con sabina negral (Juniperus phoenicia) y coscojas (Quercus coccifera). Conforme el barranco desciende, el bosque y los árboles son gradualmente relevados por la flora típica de zonas áridas como el romero (Rosmarinus officinalis) y el tomillo (Thymus vulgaris) o amantes de los yesos, como el asnallo (Ononis tridentata), endemismo ibero-norteafricano.
En el fondo del barranco, donde el sol castiga durante menos horas y la humedad se mantiene, crece una exuberante vegetación que origina un bonito contraste de ambientes. Además, el angostamiento del barranco en algunos puntos crea sinuosos cortados y curiosas formaciones, que hacen de su recorrido una agradable experiencia.
La fauna más destacable del barranco de las Almunias son las aves; desde el búho real (Bubo bubo) y el milano negro (Milvus migrans), hasta una de las aves insignia de la estepa y en peligro de extinción, la alondra de Dupont (Chersophilus duponti). La collalba de mayor tamaño de la península ibérica, la collalba negra (Oenanthe leucura), presenta sus densidades de población más elevadas de Aragón en las zonas abarrancadas de los alrededores de La Plana. Estas aves se alimentan de invertebrados, que incluyen desde pequeñas hormigas hasta otros de mayor tamaño como la escolopendra (Scolopendra cingulata), y de reptiles, como la lagartija común (Podarcis hispanicus).
