PAS: Personas Altamente Sensibles
Es posible que hayas conocido a personas así en tu entorno o incluso que tú mismo/a te sientas identificado con muchas de las cosas que vamos a comentar. La Asesora Psicológica del CIPAJ te habla del tema, ¿te interesa?...sigue leyendo.
Fecha de publicación: julio de 2022.
En los años 70 del siglo pasado, Elaine Aron, psicoterapeuta y profesora universitaria, empezó a hablar de Personas Altamente Sensibles o PAS, para hablar de la sensibilidad al procesar lo que se siente. Llegó a la conclusión de que el porcentaje de personas con estas características ascendía a la friolera cifra del 20% de la población.
¿Qué es? | ¿Soy PAS? | ¿Qué puedo hacer?
¿Qué es exactamente ser una Persona Altamente Sensible (PAS)?
Las personas altamente sensibles nacen con un sistema nervioso que percibe y procesa los estímulos (tanto internos como externos) de forma más intensa. Es decir, existen diferencias en la manera en que esta parte de la población recibe la información sensorial, y se dan también ciertas peculiaridades bastante grandes en otras áreas como la emocional y la social.
Mediante la imagen por resonancia magnética funcional (una especie de "foto" de cómo funciona el cerebro de una persona) se ha comprobado esta diferencia en el funcionamiento y la activación de regiones cerebrales encargadas de realizar algunas tareas. Se han encontrado discrepancias importantes en áreas relacionadas con los sentimientos de empatía. Hay pruebas de altos niveles de conciencia y de capacidad de respuesta emocional en personas con esas características.
Aunque se trata de un campo de investigación relativamente reciente y hay todavía cosas que no se conocen del todo bien, hay tres características que se encuentran en las personas con alta sensibilidad:
- Zona de confort reducida: tienen más dificultad para encontrarse seguras.
- Rápida sobreestimulación sensorial: sensación de agobio ante ruidos fuertes, un olor intenso, etc. que el cerebro no puede asimilar.
- Larga resonancia de los estímulos y las informaciones: la persona mantiene la sensación o la información que ha recibido en su mente durante más tiempo.
De esta forma, los rasgos relacionados con la alta sensibilidad pueden tener, por un lado, efectos positivos: se sabe que muchos/as de los/as grandes artistas y pensadores/as de la Historia fueron personas altamente sensibles (PAS), pero, por otro lado, también generar estrés. El bombardeo sensorial, junto con la falta de tiempo para procesarlo hace que las personas PAS tengan una mayor propensión a padecer trastornos psicológicos como la ansiedad y la depresión a lo largo de su vida.
¿Cómo sé si soy una persona altamente sensible (PAS)?
Es habitual que a estas personas les molesten mucho los ruidos, las luces fuertes, que tengan la piel sensible, un gran sentido del gusto y el olfato, incluso pueden sufrir de intolerancias alimenticias. En cuanto a lo social, suelen estar comprometidas e involucrarse como activistas de distintos movimientos como el feminismo, el medio ambiente, etc. Karina Zegers de Beijl, especializada en el rasgo de la alta sensibilidad, nos habla de cuatro pilares fundamentes:
- Mayor profundidad de procesamiento de la información.
- Sobreestimulación.
- Gran empatía y emocionalidad.
- Sensibilidad para los detalles y los matices.
Además de estos cuatro pilares fundamentales, dicen los expertos que para saber si eres PAS tienes que reconocerte en un gran número de las siguientes características: sentirse influido/a por el estado de ánimo ajeno, tener un umbral del dolor bajo, tener dificultad para manejar el exceso de información sensorial, ser sensible a todo tipo de sustancias (desde los alimentos hasta los medicamentos), tener facilidad para asustarse y agobiarse, desear agradar a los demás y acarrear problemas para poner límites… la lista es larga. Existen pruebas específicas para valorar si una persona es o no altamente sensible que pueden servir como indicación inicial más o menor segura.
¿Qué puedo hacer si soy una Persona Altamente Sensible (PAS)?
Como hemos visto, el conjunto de todas estas características puede llevar a personas altamente sensibles a percibir el mundo como un lugar hostil y a vivir los desafíos de su vida como una fuente de frustración. En ocasiones, esto se traduce incluso en el deseo de aislarse. Sin embargo, si alguna persona se siente identificada con estas características ha de saber que el mejor camino va a ser precisamente el contrario, ya que las personas con altas capacidades empáticas van a sentirse siempre más reconfortados en las relaciones profundas y duraderas.
Entender la manera en la que funciona el sistema neurosensorial de una PAS proporciona herramientas imprescindibles para aprender a sentirse mejor. Muchas de las personas que comparten este rasgo sienten que ha habido en sus vidas un punto de inflexión después de ser conscientes de las características que las definen.
Entre las estrategias a destacar está el autoconocimiento personal, que ayuda a aceptar la forma de ser y las diferencias que existen entre los demás y uno/a mismo/a; vivir de forma reflexiva que hace que nos hace aprender a desconectar y proporciona un mayor autocuidado; y orientarse hacia las fortalezas para tener un buen contacto interno y con los demás.
Puedes encontrar más información en los libros: El Don de la sensibilidad. Las personas altamente sensibles de Elaine Aron; Personas altamente sensibles de Karina Zegers de Beijl y Personas altamente sensibles. Claves psicológicas y espirituales de Rafael Pardo.
Leticia Chaverri Mendoza, Asesora psicológica del CIPAJ. Centro de Información y Asesoramiento Juvenil.