3. Riberas del Ebro (de la Plaza Europa hasta la Expo)

Nuestro último tramo del recorrido abarca desde las riberas del río Ebro hasta alcanzar el recinto ferial de la Expo, si bien las obras las vamos a encontrar a una mayor distancia es por eso que este final de trayecto se puede hacer paseando a pie, en patines o en bicicleta por los caminos cimentados de las orillas del río.

Es junto al puente de la Almozara, en el Parque de San Pablo, donde se encuentra Aguadora una pieza escultórica de Isabel Queralt Solari, ejecutada entre 2009 y 2011.Se localiza sobre un pedestal cuadrangular de piedra de Calatorao en el que hay una placa metálica con un poema dedicado al agua firmado por José Bada. Además, se ubica en un entorno apropiado, ya que en sus proximidades se encuentra la calle de Aguadores, perpendicular al río. De la misma escultora cabe apuntarotracuya temática también se adaptó al lugar, pues su escultura Birds se sitúa en Valdespartera cerca de la calleLos Pájaros, título de una gran película de Alfred Hitchcock. Frente al tratamiento realista y el tradicional bronce utilizado en la Aguadora, llama la atención allá el minimalismo y el empleo del acero corten, características que también se observan en Buscando un encuadre, cuya iconografía también nos transporta al mundo cinematográfico, del que Isabel Queralt intenta captar uno de los momentos en la preparación de una película.

Prosiguiendo nuestro paseo por la ribera del Ebro, alcanzaremos la Arboleda del boulevard de Ranillas donde en junio de 2010 se instaló otra de las piezas conmemorativas que se integran en las calles de nuestra ciudad: el Busto de Blas Infante, una obra de Rosa Álvarez Halcón, escultora, pintora y restauradora zaragozana formada en Sevilla. El promotor de esta escultura fue la Casa de Andalucía de Zaragoza con motivo del 125 aniversario de su nacimiento, ya que Blas Infante es considerado el "Padre de la Patria Andaluza". Su busto, elaborado en bronce, posee un tratamiento realista que resalta las facciones severas y austeras del retratado, aunque de tamaño superior al natural para poder ser contemplado desde múltiples puntos de vista en un escenario muy amplio. Su imagen se eleva sobre un pedestal que tiene un corte transversal en ángulo, creando dos efectos diferentes en este, posee una zona inferior muy tosca y una superior bien pulida. El pedestal es de granito verde eucalipto y en él hay un grabado que nos indica quien es este personaje y el promotor de la obra, además aparece también el escudo de la Casa de Andalucía en Zaragoza. Se trata de la primera escultura de esta artista en espacios públicos.

Para visitar el siguiente ejemplo de obra artística llevada a cabo por una mujer que conforma nuestro recorrido, debemos cruzar al otro margen del río Ebro y bien podemos hacerlo por el Pabellón Puente, una infraestructura diseñada por la arquitecta angloiraquí Zaha Hadid, encargada para la Exposición Internacional de Zaragoza celebrada en el año 2008.Lo cierto es que se convirtió en una de las imágenes de la misma, siendo además una obra de carácter permanente. Una pieza de ingeniería conceptual que se puede valorar desde un punto de vista artístico, ya que su siluetase asemeja un gladiolo que se abre y que se cierra en las inmediaciones del agua. Aunque su función ha quedado reducida únicamente a la de puente, ha sido utilizado por diferentes empresas publicitarias como escenario de múltiples anuncios de automóviles gracias a su innovador y particular diseño arquitectónico.

Junto al Pabellón Puente y colindando con el Puente del Tercer Milenio, en una zona verde encontramos la Espiral Mudéjar, una instalación la artista madrileña Diana Larrea, encargada por Expoagua Zaragoza en el año 2008 para solucionar los problemas de conexión entre los espacios verdes y la trama urbana. Se trata de un camino de ladrillo rojizo colocado en espiga en forma de espiral, ya que Diana plantea en este proyecto una síntesis entre agua, arquitectura y el tiempo, pues la forma de la espiral se contempla como el ciclo del agua en la naturaleza: dinámico, continuo y necesario. Además juega con el ladrillo en esta espiral y su significado, pues este es el material de construcción principal del estilo mudéjar. Por otra parte, la espiral aparece rodeada de césped creando así contrastes cromáticos entre la obra y en entorno en el que se ubica, dirigiendo la mirada del ciudadano hacia la naturaleza y creando a su vez juegos visuales gracias a las formas laberínticas que nos guían hacía los diferentes caminos. Asimismo, con esta obra invita al espectador a ser partícipe ya que puede caminar sobre ella, jugar y recorrer el camino, convirtiéndose el espectador en el verdadero protagonista. Con todo ello, la artista invita al público a disfrutar un paseo y reflexionar acerca de la relación entre la naturaleza y el hombre.

Otro punto de vital interés se encuentra en el extremo oriental del Parque del Agua Luis Buñuel; allí se localiza una de las Intervenciones Artísticas de la Expo del año 2008, Un descampado en la ribera del río Ebro, obra de la artista zaragozana de mayor proyección internacional Lara Almarcegui. Se trata de un terreno de 500 metros cuadrados, conservado sin ser diseñado, ni ajardinado, ni renovado, un terreno llano, desprovisto y sin habilitar, un espacio protegido de cualquier uso durante 75 años con el que pretende hacer reflexionar, recapacitar y meditar sobre las actuaciones humanas en la naturaleza, estamos ante una intervención conceptual. A la entrada del descampado donde se encuentra esta intervención hay un cartel que expone la obra y la actuación, su carácter de proceso y de proyecto vivo, pues para comprender esta obra es fundamental su explicación. Además, Lara Almarcegui completa la información con un folleto en el que presenta la obra y sus objetivos junto con un plano de descampados actuales de la ciudad de Zaragoza, que permite ver los cambios en el tiempo, el crecimiento de la vegetación y todas las actuaciones sobre estos. Otra intervención realizada en el Parque del Agua, promovida y encargada por Expoagua Zaragoza 2008, fue Intercambio, de Eulalia Valldosera. Se trataba de una instalación lumínica, de carácter temporal, en la fachada del edificio DHC, una central de producción de energía que suministra frío y calor a todos los nuevos edificios del meandro del Ranillas. En su fachada lograba fundir archivos de video, de imágenes y textos, proyectados en ráfagas y relacionados con el agua, que se acompañan de luces y sombras con los que pretendía mostrar los intercambios naturales en el ecosistema. Era una obra muy sorprendente para el espectador al mismo tiempo que atractiva ya que por las noches sus imágenes y luces inundaban de vida y luz el edificio. Y, como prueba adicional de la importante cuota femenina entre las intervenciones artísticas encargadas por Expoagua Zaragoza 2008, no hay que olvidar la obra de Eva Lootz, Oreja parlante, una intervención artística en forma de oreja con una instalación de audio, ajardinamiento e iluminación, ejecutada con grava sobre matorrales y arbustos, situada junto a la Ribera de Ebro, en la margen derecha entre el Puente de la Unión y el Azud.

Sin llegar tan lejos, quienes quieran completar este vasto recorrido bien podrían ir hasta el Parque Tío Jorge. No es excesiva la distancia desde el recinto ferial de la Expo, que se puede salvar con un atractivo paseo por la orilla del Ebro disfrutando de la naturaleza a pie, en bicicleta o en patines, siendo esta un buen hilo conductor entre una obra artística y otra. Allí reposa, Hombre del Bosque, de la escultora Alicia Martínez García, una joven artista turolense que recibió este encargo gracias a una iniciativa de la Escuela de Arte, donde se realizó esta obra en el año 2002, junto con otras integradas en el mismo proyecto. La imagen es una figura monolítica que representa un cuerpo humano aunque de formas poco definidas por lo que se halla entre la figuración y la abstracción. La escultura tallada en madera pretende la revitalización y reivindicación de los materiales orgánicos en su entorno, ya que se estaban talando los árboles que se habían secado, así como la unión entre hombre y naturaleza, imprescindible para la vida.Sin embargo, esta relación entre individuos y medio ambiente es a veces menoscabada por actos vandálicos como los que han conducido al deterioro de esta pieza, aparte de otros agentes bióticos, físicos y químicos nocivos para la madera.

En las inmediaciones del barrio Arrabal podemos contemplar asimismo el mural realizado por Nicolas Barrome y Amandine Urruty, dos artistas franceses que participaron en la novena edición del Festival Alsalto (2014), cuyo mural está protagonizado por unos simpáticos monstruos de colores muy alegres y vistosos. Con esta obra concluye nuestro recorrido, aunque para poner el broche final a nuestro itinerario parece oportuno mencionar otra pieza integrada en la naturaleza, en el Parque Grande: Alicia García y Sandra Liarte son las responsables de una intervención ganadora de un concurso convocado por el Ayuntamiento de Zaragoza en diciembre de 2014, cuyo fin era la decoración del pavimento del paseo de los Plátanos del Parque Grande José Antonio Labordeta: lleva por nombre A callejear, que la calle es tuya y de nadie más, instalada en la primavera de 2015, a través de unas plantillas de aluminio que proyectan las sombras de los árboles y los pájaros, complementadas con letras de una canción del cantante epónimo del parque, logrando una obra de carácter conmemorativo a la vez que creativo. Esta reciente incorporación al espacio urbano en Zaragoza da prueba de que ya hay una mayor inquietud a favor de que las mujeres artistas tengan una representación más equilibrada en el espacio urbano, para que nuestra ciudad sea escaparate de todo tipo de sensibilidades artísticas.