14 marzo 2024

El Ayuntamiento invierte en la Casa Amparo más de un millón de euros para mejorar los servicios y reforzar distintas estructuras

El equipamiento tiene en la actualidad 128 residentes, cuyo perfil medio son personas mayores con alta dependencia, graves circunstancias sociales y escasez de recursos

Las obras de reforma de las habitaciones de la zona noroeste finalizarán este mes y pronto se iniciará la rehabilitación de la cubierta del iglesia, catalogada de interés monumental

El Ayuntamiento de Zaragoza avanza en la rehabilitación y mejora de las instalaciones de la Casa Amparo, que en estos momentos tiene 128 residentes, en su mayoría personas con dependencia, cuyo objetivo es mejorar la prestación del servicio y la calidad de la atención a los residentes.

Las actuaciones suponen una inversión global de 1.020.932,31 euros divididas en diferentes fases. Estas obras cuentan con 369.094,26 euros de fondos europeos NextGeneration, dentro de las líneas de ayudas del Plan de choque para la Economía de los Cuidados y Refuerzo de las políticas de igualdad e inclusión. Así lo han detallado esta mañana, durante una visita a los trabajos, el consejero de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, y la consejera de Políticas Sociales, Marian Orós.

Por un lado, los operarios ultiman la adecuación, en la zona noroeste del edificio, de la planta primera donde "se han creado cinco nuevas habitaciones, una zona de atención geriátrica y un despacho multiusos", ha detallado Serrano. Las estancias resultantes cuentan con baño privado, para lo que se ha tenido que acometer una actuación integral de saneamiento y fontanería, así como la redistribución del tabicado. Pero, además, "se ha creado todo un sistema de refrigeración en el falso techo que funciona mediante tuberías y evita el uso de aires acondicionados para la climatización", ha explicado el consejero.

Estas obras, que finalizarán antes de Semana Santa, las realiza Construcciones Iberco por un importe de 586.988,68 euros (IVA incluido), donde también se incluye una modificación para poder reforzar el forjado entre las plantas. "Cuando se iniciaron los trabajos en este primer piso se detectó la necesidad urgente de ejecutar un refuerzo estructural del forjado del suelo que lo separa de la planta calle, donde hay un gran salón polivalente", ha especificado Serrano.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Zaragoza ha adjudicado por 433.943,63 euros (IVA incluido) las obras de rehabilitación de la cubierta de la iglesia de la Casa Amparo, que efectuará BCO Construcciones y Servicios SL con una duración de 6 meses. Las obras fundamentales previstas incluirán también correcciones y la subsanación de algunos aspectos complementarios que afectan al exterior del edificio en lo referente a las humedades que suponen un deterioro del mismo.

"Existía una preocupación por el estado de las cubiertas", ha advertido Serrano, por lo que en 2020 se ordenó empezar el proyecto para su arreglo. La cubierta o tejado en sí no tiene valor valor histórico o documental, por lo que se puede ejecutar una renovación integral de la estructura con materiales de mucha mayor durabilidad, aunque conservando todos aquellos aspectos que definen sus características arquitectónicas. De este modo, "se demolerá la cubierta actual, empezando con la retirada de las tejas y conservando las que se encuentren en buen estado para su reutilización. Se eliminará el tablero de cañizo y yeso, así como la estructura de madera existente, evitando el apoyo en las bóvedas. Se hará un reparto de las cargas estructurales y se restaurarán las cornisas", ha resumido Víctor Serrano, quien ha advertido que también se ejecutarán numerosas labores de carpintería, bajantes de pluviales, electricidad, protección antiincencios y seguridad.

"El deterioro de la cubierta es generalizado y progresivo, con riesgo evidente de colapso de algunas vigas. Ya se hizo un refuerzo interno como solución temporal, pero ahora vamos a actuar de manera integral", ha explicado Serrano, quien ha resaltado el compromiso del Gobierno municipal con el patrimonio histórico artístico de la ciudad.

UN FARO SOCIAL

En los últimos años, el Ayuntamiento de Zaragoza ha invertido más de 1,6 millones de euros en la Casa Amparo. "A las obras actuales", ha explicado la consejera de Políticas Sociales, Marian Orós, "deben sumarse otras actuaciones como la climatización de la primera y segunda planta (524.621,56 euros) y la pintura de estos espacios (28.304,49 euros); la mejora de la eficiencia energética y el confort de los residentes con el cambio de caldera (35.658,58 euros); la implementación de medidas de seguridad contra incendios en la planta sótano y la escalera exterior (45.617 euros); o la instalación de ventilación forzada en los aseos (35.164,80 euros)".

"Estas inversiones reflejan el compromiso social de este equipo de Gobierno con las políticas de dependencia", ha recordado la consejera Orós, quien recordado la importancia de Casa Amparo, pues los trabajadores realizan "con mucha profesionalidad y mimo una atención centrada en la persona para promocionar la autonomía personal". "Buscamos que personas con pocos recursos o sin red familiar reciban el mejor cuidado en un lugar en el que se sientan como en casa", ha añadido, al tiempo que ha enfatizado la importancia "de mejorar la calidad de vida de los residentes y retrasar el deterioro propio de la edad o de las enfermedades que padecen".

"Este hogar es el verdadero faro social del Ayuntamiento de Zaragoza y presta ayuda a nuestros mayores que son derivados de los Centros Municipales de Servicios Sociales o del Albergue Municipal, y que tienen una grave problemática social, especialmente los que son derivados del albergue o de la Casa Abierta", ha aseverado Orós.

En la actualidad hay 128 residentes, 42 hombres y 86 mujeres, con una edad media de 83,9 años. "Cuando llegan aquí, desde Terapia Ocupacional se valora la autonomía, así como su estado cognitivo y sensoperceptivo, se establecen unos objetivos individuales y se plantean actividades individuales y grupales", ha detallado la consejera.

"El trabajo con los residentes se desarrolla desde cuatro áreas", ha detallado Orós. En el Área Física "se fomenta la autonomía, el autocuidado, el control postural, el uso y manejo de teléfonos móviles, el taller de cocina, la psicomotricidad y relajación, o el taller de recuperación funcional para incrementar la movilidad articular y la fuerza muscular", ha explicado la consejera.

En el Área Cognitiva se hacen talleres de estimulación, orientación a la realidad y charlas sobre experiencias de vida y momentos históricos. Mientras que en el Área de Ocio y Tiempo Libre "se ofertan talleres de artesanía creativa, laborterapia, huerto ecológico, lectura fácil, escritura y música, además de realizar actividades lúdicas de su interés como juegos de mesa, bingo, juegos tradicionales, juegos de intelecto, etc, a lo que se suma un amplio programa de ocio y tiempo libre que incluye salidas al exterior, teatro, tertulias, exposiciones… Por último, "desde el Área del Entorno se trabaja en la adaptación y eliminación de barreras arquitectónicas; la formación y asesoramiento a trabajadores, estudiantes y voluntarios; las videollamadas con familiares; o las actividades intergeneracionales con el CEIP Santo Domingo que promueven el vínculo y el conocimiento mutuo entre niños y personas mayores", ha apuntado Orós.

HISTORIA CASA AMPARO

La Casa de Amparo se establece en 1871 en un pabellón construido en el solar del Convento de Santo Domingo. El edificio fue ampliado a partir del año 1885 según proyecto de Ricardo Magdalena, dándole al edificio la disposición que tiene actualmente y marcando las directrices que se seguirán hasta la conclusión de mismo.

En 1905 se inician las obras del pabellón que da a la calle de Predicadores. Entre los años 1931 y 1935 se finalizan las obras de la Casa de Amparo, ejecutándose dos nuevos pabellones: el pabellón norte y uno de los laterales. En 1940 se realizan obras de remodelación interior y restauración de la iglesia y en 1944 se llevan a cabo obras para embellecimiento de vestíbulo. Desde sus orígenes hasta la actualidad se han estado realizando constantemente obras de remodelación y mejora de las instalaciones, constando en los archivos municipales expedientes urbanísticos desde finales del siglo XIX.