12 septiembre 2023

El Ayuntamiento de Zaragoza inicia las medidas complementarias para incrementar la seguridad en episodios tormentosos en el barranco de la Muerte

Los modelos predictivos y los análisis profundos de los datos muestran que un evento similar al del 6 de julio tiene un periodo de retorno de 38 años, para una duración de 30 minutos, y de 93 años, para 1 hora
El centro escolar, que ya está protegido gracias el muro perimetral construido por el Gobierno de Aragón, incrementará su seguridad para episodios de retorno de 500 años con las medias supletorias que se ejecutan ahora

El Ayuntamiento de Zaragoza ya ha comenzado a trabajar en las medidas complementarias al muro perimetral que preserva al CEIP María Zambrano de los efectos de tormentas extraordinarias. Así lo ha detallado el consejero de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, quien ha desgranado toda la información recogida en los informes municipales sobre los riesgos de inundación del barranco de la Muerte junto al coordinador general de la consejería municipal, Julio López, y a uno de los miembros de Spesa Ingeniería, la consultora encargada de los estudios, Eduardo Lastrada.
Los informes de expertos que encargó el Ayuntamiento de Zaragoza relativos a las medidas de protección del CEIP María Zambrano concluían que el muro perimetral (que ya ha construido la DGA) es suficiente frente a episodios tormentosos similares a los registrados el pasado 6 de julio, por lo que la seguridad del centro, de esta manera, alcanzaba un nivel óptimo. Asimismo, se apuntaban otras medidas para reforzar otros episodios similares o más intensos. Se trata de unas actuaciones que ya ha comenzado a ejecutar el Área de Infraestructuras, como la instalación de sensores en el cauce del barranco, que ya se han colocado y está en fase de conectividad con los servicios de emergencia y los sistemas de Protección Civil. Además, se ultiman las tareas para iniciar próximamente el cambio de bocas de colectores, pasando de un diámetro de 1.200 mm a uno de 1.800 mm, lo que "disminuiría el riesgo de taponamientos, siendo una actuación relativamente sencilla". Y, por último, se ha comenzado a diseñar una actuación por emergencia para crear un canal perimetral al muro del centro escolar.


ESTUDIO TÉCNICO MULTIDISCIPLINAR
El estudio municipal, encargado a una consultora de alta solvencia en proyectos de ingeniería ambiental, fue realizado con un equipo técnico multidisciplinar compuesto por expertos en Ciencias Geológicas, Físicas, Topografía, Geodesia, Delineación, Ingeniería Técnica Agrícola, e Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, con más de 30 años de experiencia en muchos de los casos, y se ha contado  con  la colaboración del Área de Hidrología y Sistema de Ayuda a la Decisión de la Confederación Hidrográfica del Ebro, así como de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). 
Respecto a lo acontecido el 6 de julio de 2023, los estudios municipales tienen en cuenta el Informe de la crecida súbita del Barranco de la Muerte elaborado por la Confederación Hidrográfica del Ebro para describir el evento meteorológico, así como el análisis de datos de la Aemet. Con todo ello, se observa que "la excepcionalidad del evento radica en su duración" y expone que "el periodo de retorno del evento ocurrido el 6 de julio corresponde a 38 años para una duración de 30 minutos y de 93 años para 1 hora".
Para el análisis completo, los informes elaborados incluyen un completo estudio histórico y geomorfológico, con la configuración histórica y la situación actual, así como dos estudios: uno de inundabilidad, y otro pluviométrico, incluso con mapas de distribución espacial de las precipitaciones en la cuenca y el análisis extremal de las lluvias. Asimismo, se ha realizado un pormenorizado cálculo de los caudales según el método racional, y se ha desarrollado un modelo pluviométrico e hidráulico en 2D con cauces estimados, cartografía, vuelos LiDIAR (tecnología láser empleada en aplicaciones de geología, sismología y física de la atmósfera), el modelo digital del terreno, la vectorización de edificios y otros obstáculos, la identificación de motas y terraplenes de obras lineales, y los coeficientes de rugosidad del terreno. El estudio también contempla un análisis completo de la red de colectores, del parque del Barranco, del Cementerio de Torrero, de la Z-40, la línea del AVE y la cuenca aguas arriba, así como el mallado.
Para el planeamiento y diseño de alternativas, el completo estudio municipales analiza los distintos componentes del análisis de riesgos como "la peligrosidad (que nos habla de la probabilidad de que ocurra un evento y de su capacidad de generar daño), la exposición (personas y bienes que pueden ser afectados por el evento) y la vulnerabilidad (o grado de susceptibilidad de la sociedad y los bienes a sufrir el daño)".

MURO Y CANAL PERIMETRAL
El estudio "plantea varias alternativas, divididas en dos fases de ejecución u horizontes temporales diferentes. Se ordenan de menor a mayor complejidad y de mayor a menor efectividad, y todas ellas se diseñan para un periodo de retorno de T = 500 años". 
La Fase de Ejecución 1 se centra en la "reducción del riesgo de inundación de los elementos más vulnerables, como el CEIP María Zambrano" y expone cuatro medidas concretas: sensores de nivel y lluvia; incremento de la capacidad de la obra de drenaje transversal del barranco de la Muerte; un muro de protección del colegio; y un canal perimetral aguas arriba de este muro. De hecho, con el muro, el centro escolar "queda protegido para un evento similar al del 6 de Julio de 2023" y "para una protección superior, asociada a un periodo de retorno de T=500 años, es necesaria la construcción del canal perimetral".
La ejecución del muro del colegio, que ya ha levantado el Gobierno de Aragón antes del inicio del curso escolar, evitará la entrada de agua procedente del barranco de la Muerte. Su construcción hace que el agua tenga que coger cota para poder ser desaguada por el lateral. Según los datos proporcionados, la coronación del muro se encuentra a la cota 243.07 msnm. La cota del agua que se alcanza para un periodo de retorno de T = 500 años es de 243.4 msnm, y fue de 242.9 msnm para el evento del 6 de julio.  
Asimismo, se considera necesario disponer un canal perimetral que desagüe hacia la Z‐30 inmediatamente aguas arriba del nuevo muro. Este canal puede ser de múltiples dimensiones, si bien tendría una efectividad máxima con unas dimensiones de 360 ml y una anchura media de 18 metros. Esta actuación, ya planificada por el Ayuntamiento de Zaragoza, podrá ejecutarse próximamente por la vía de emergencia, si bien se espera la aprobación del mismo por parte de la CHE.
A todo ello se suman las mejoras en las obras de drenaje trasversal en el barranco de la Muerte, que permitirían incrementar el caudal interceptado, pasando de 3 m3/s a aproximadamente 5 m3/s. Para ello, se cambiará el diámetro de las bocas de los colectores de 1.200 mm por otra de diámetro 1.800 mm, hasta el pozo que lo conecta con el colector del camino de Arráez (de 1.500 mm) y continúa hacia la Z‐30 con un diámetro de 1.800 mm. Esta actuación ya está en marcha y se podrá ejecutar en un plazo breve de tiempo por el Área de Infraestructuras.
Por último, el Ayuntamiento ya ha instalado distintos sensores de medición de caudales en las canalizaciones del barranco, que ahora se conectarán a los sistemas de prevención y protección para activar las medidas que fueran necesarias en caso de registrarse incrementos de flujos extraordinarios.
Por otra parte, en la Fase de Ejecución 2, los estudios se centran en la reducción del riesgo de inundación en Z‐30, si bien se añade que "deberá ser estudiada con mayor profundidad", para lo que se presentan distintas actuaciones como los diques de laminación en el barranco del Camino de Arráez y aguas arriba del existente en el parque del barranco y de la Z‐40, así como depósitos o tanques de tormenta en los campos de fútbol junto al cementerio de Torrero.