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La cicatriz urbanística que generan los 8.952,03 metros cuadrados sin uso del antiguo Colegio Jesús y María, en el centro de la ciudad, emprende el camino hacia una solución definitiva. La Comisión de Urbanismo someterá a votación, el próximo jueves, la toma en consideración de una nueva propuesta de modificación aislada del PGOU relativa a la parcela que ocupaba el antiguo centro educativo y que lleva casi treinta años sin uso. Así lo ha explicado el consejero de Urbanismo y Equipamientos, Víctor Serrano, quien ha capitaneado el proceso de negociación que llega ahora a un consenso al mejorarse la oferta de los promotores e incrementarse el beneficio público para la ciudad, como han respaldado la gran mayoría de grupos municipales a lo largo de este mandato. 
"Conseguiremos así borrar del mapa otro vacío urbano que lleva treinta años  empobreciendo y degradando esta zona de la ciudad", ha aseverado Serrano, quien ha recordado el "arduo trabajo" realizado para fomentar en estos años "la eliminación de esos espacios vacíos que bloquean el desarrollo orgánico del urbanismo y la movilidad de la ciudad". "Lo hemos logrado con Aceralia en el Picarral, con Averly en el Delicias, con Tenor Fleta en San José o con los antiguos Depósitos de Pignatelli en Universidad, porque estamos centrados en la regeneración de los barrios y en la dignificación de la escena urbana, devolviendo la actividad a terrenos que mejorarán la calidad de vida de los vecinos en los distintos distritos de la ciudad. Las cicatrices urbanas atentan contra la armonía urbana de las ciudades", ha sentenciado Víctor Serrano.

Los suelos del antiguo Colegio Jesús y María ocupan una superficie de 8.952,03 metros cuadrados. Para ellos, la propuesta que se lleva a consideración ahora propone materializar la edificabilidad residencial total de 28.891,46 metros cuadrados, con una capacidad para 160 viviendas libres en una única parcela de 3.370,32 m² de superficie (el 37,65% del ámbito) recayente a la avenida de Goya y a la calle de Cortes de Aragón, y se cederían al municipio los 5.581,97 m² restantes (62,35%). 
En resumen, la operación supondría un área con 160 viviendas libres, rebajándose así en 50 las expectativas originales de los promotores (210); una parcela municipal libre de cargas, que coincide con la antigua edificación del centro educativo en sí; y una compensación económica de 6.102.000 euros a favor del ayuntamiento, que el consistorio quiere que se reciban mediante la construcción de un equipamiento público para la ciudadanía en la parcela que quedaría en propiedad municipal. "Para configurar el equipamiento público y los usos que prestará vamos a atender las peticiones que históricamente, durante los últimos treinta años, nos han hecho los vecinos. Desde el distrito, los vecinos y sus asociaciones nos requieren la necesidad de un Centro Cívico. La presidenta de la Junta de Distrito, Carolina Andreu, así me lo traslada y recuerda con el máximo interés cada vez que hemos ido hablando de los avances en Jesús y María. Los usos de un centro cívico que cubran las necesidades de mayores y jóvenes y, con carácter general, todas las necesidades del distrito, que son muchas", ha dicho el consejero de Urbanismo. 
Con esta propuesta, y al margen de que durante la tramitación de la modificación aislada del PGOU se ajusten aspectos técnicos, los informes municipales del Área de Urbanismo señalan que "la contraprestación al municipio mejora de manera considerable en términos cuantitativos con respecto a la propuesta presentada por la propiedad en 2020".