El Ayuntamiento de Zaragoza inicia de forma subsidiaria el derribo del inmueble en ruina de la calle de José Zamoray
Los vecinos desalojados podrán recoger sus pertenencias, con todas las medidas de seguridad oportunas, una vez que se haya asegurado el edificio y se hayan retirado los elementos desprendidos y escombros.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado hoy las actuaciones, por ejecución subsidiaria, del derribo de los edificios 8 y 10 de la calle Zamoray que el pasado viernes colapsaron provocando su cierre tras declararse en ruina. Tras agotar el plazo de 48 horas para que el propietario del inmueble ejecutara la demolición, el área de Urbanismo ha comenzado las obras de forma subsidiaria que han empezado por un apuntalamiento de la estructura para asegurar los trabajos.
El proceso ha comenzado por asegurar toda la primera crujía, fachada y muros interiores en el inmueble. Además, se acabará de retirar los elementos desprendidos y se desescombrará. El objetivo es que quede en pie la primera crujía para mantener las fachadas de momento sin la necesidad de montar un estabilizador en la calle. Una vez asegurada la zona, explican desde Urbanismo, será posible la intervención de la policía y bomberos para que den aviso a los vecinos y procedan a recoger los efectos personales que quedaron en el interior tras ser desalojados.
Después de ese momento, la actuación proseguirá "de arriba hacia abajo, consolidando siempre la primera crujía para conservar las fachadas y se pondrá una pequeña cubierta provisional de chapa para que, cuando llueva, el agua no cargue los forjados que se han dejado en la primera crujía", han explicado los técnicos municipales.
"También se va a revisar el terreno bajo un tramo de la fachada principal en el que el cimiento parece haber cedido en una zona en la calle, por si estuviera hueco, para que, en tal caso se consolide con hormigón", han detallado desde los servicios municipales.
Durante los trabajos, que podrían alargarse más de un mes, la calle de José Zamoray permanecerá cortada hasta que el edificio esté bien asegurado y luego se permitirá un paso peatonal protegido y señalizado con vallas de un metro de anchura.
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