Ayuntamiento de Zaragoza

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MARIANO DE CAVIA Y LAC > 1855-1920

Cu 27

Hijo de un notario zaragozano, dejó sin acabar sus estudios de Derecho y se dedicó muy tempranamente al periodismo, iniciando su vocación en El Diario de Zaragoza, El Diario de Avisos, Revista de Aragón... Fue el periodista más importante de su época, dueño de un estilo literario propio y objeto de un amplio reconocimiento por la opinión pública nacional. Modelo de periodista independiente en su tiempo, escribió en El Liberal desde 1881, donde comenzó a construir su fama profesional y personal: continuó su carrera en El Imparcial a partir de 1895; recogió en diversos libros sus numerosas colaboraciones en la prensa de la época. Mantuvo siempre orgulloso su identidad zaragozana y aragonesa, con la misma vehemencia con la que se consideraba un patriota español.

En 1916 la Real Academia de la Lengua lo eligió para ocupar el sillón A; en el mismo año el Ayuntamiento de Zaragoza lo nombró Hijo Meritísimo de la ciudad y Alfonso XIII le imponía en persona la Gran Cruz de la Orden Civil y en 1917 pasó a la redacción de El Sol, en la que permaneció hasta su fallecimiento a los 55 años. El Ayuntamiento de Zaragoza solicitó y gestionó que fuese enterrado en el cementerio de la ciudad. Su estatua en la plaza de Aragón, obra del escultor José Bueno, recuerda su memoria desde 1921. Al poco tiempo de morir Cavia en julio de 1920 el diario Heraldo de Aragón, tomó la iniciativa de promover la realización de un monumento en su ciudad, como homenaje al ilustre periodista. El domingo 3 de julio de 1921, sólo unos días antes del primer aniversario de la muerte del periodista, el monumento fue inaugurado, con la presencia del escritor Vicente Blasco Ibáñez; fue éste el primer monumento de la tipología busto sobre pedestal que se ubicó en la Plaza de Aragón. Su estilo periodístico marcó toda una época de la prensa española.