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El transporte del bus escolar es seguro y tiene un alto nivel de cumplimiento de las medidas de seguridad, según se desprende de los resultados de la campaña de vigilancia especial que la Policía de Zaragoza, en colaboración con la DGT, ha realizado en el sector. En total se controlaron 25 buses y se tramitaron seis denuncias, todas ellas de carácter administrativo.
Del 24 al 30 de noviembre, los agentes han ido realizando revisiones selectivas de este tipo de transporte que lo utiliza medio millón de alumnos a diario en todo el país, totalizando 280 millones de pasajeros al año.
En Zaragoza, se controlaron 25 buses a su llegada a los centros escolares. Las seis denuncias que se han tramitado tienen que ver con los dispositivos acústicos de marcha atrás, los extintores y triángulos de señalización y los dispositivos que accionan las puertas de emergencia. Ninguno de los fallos registrados tiene que ver con la seguridad del vehículo, con infracciones en la conducción o con la falta de acompañante, que se exige en este tipo de transporte.
Esta campaña se suma a la que realiza todos los años la Policía Local entre octubre y mayo y tiene por objeto que los pequeños se desplacen al colegio en las mejores condiciones y que se mantengan los criterios de seguridad en el momento en el que los escolares bajan y/o suben al bus.
Las medidas de seguridad que se exigen a este medio de transporte son muy estrictas y los resultados y las comprobaciones en la capital aragonesa demuestran la gran responsabilidad del sector.