Patrimonio cultural

En Zaragoza, desde 2005 se celebra el Festival Asalto que convierte las calles en un gran lienzo donde artistas urbanos nacionales e internacionales plasman sus obras y realizan talleres educativos. En el 9º Festival Asalto celebrado en 2014 se apostó por localizaciones en barrios populares. Quizá ello inspiró este tema, relacionado con la emigración y la defensa u homenaje a los orígenes rurales abandonados. En este mural vemos una serie de animales representativos de la fauna ibérica como son el oso pardo, un lince, un zorro, una perdiz... Pero también, hay en primer término una recreación muy particular del cuento "Caperucita Roja y el Lobo", cuyos personajes se reinterpretan en clave muy actual, pues la protagonista va ataviada con un jersey de capucha rojo y portando una maleta de ruedas que mira a un zorro (en vez de un lobo).

Un gran mural de fachada completa integrando de forma magistral e inapreciable la ventana del edificio sobre el que se pinta y un pilar exterior de sujeción de la fachada. Dulk utilza campos de color muy compactos y contrastados entre sí para crear los diferentes planos en los que sitúa a las figuras y, así, dar tridimensionalidad a todo el conjunto. La moderna Caperucita parece despedirsel del bosque fétido y moribundo del que salen animales mortecinos, como zombis. Una metáfora de la polución y destrucción del medio ambiente que no sabemos parar y del que parece que huimos. Una contaminación que se patentiza en la nube de humo azúl tóxico que envuelve al gran oso pardo, o en el bote de miel, con tapa de cubo de basura, en el que este oso mete la lengua y que simula residuos radiactivos. También en la señal de prohibido pescar que porta el pez que se encuentra casi en el centro de la escena, y en la exhalación del pájaro, a la derecha de la escena, con la imagen de una calavera. Junto a las figuras de la chica y el zorro vemos escrita la firma o Tag del artista, pero no es su única seña de identidad. En la obra aparecen pequeñas coronas de tres puntas: una blanca sobre la cabeza del oso y otra amarilla sobre el pez que porta la señal de prohibido pescar. Coronas que Dulk emplea en muchas de sus obras y que permiten identificarlas como creaciones suyas.