Ayuntamiento de Zaragoza

Juventud / CIPAJ

Los celos y el amor

Tema: Salud

SUMARIO:

  1. Frases para pensar y debatir
  2. Los celos y el amor
  3. ¿Qué piensan los jóvenes acerca del amor y los celos?
  4. ¿Los celos tienen sexo?
  5. Beneficios de los celos
  6. ¿Cómo dejar de ser celoso?

1.- Frases para pensar y debatir

El que no tiene celos no está enamorado. San Agustín

El que es celoso, no es nunca celoso por lo que ve; con lo que se imagina basta. Jacinto Benavente

En los celos hay más amor propio que amor. François de la Rochefoucauld Los celos no son naturales ni inevitables, son una respuesta aprendida culturalmente; los celos no son una función del amor, sino de la inseguridad y la dependencia; son el miedo a la pérdida del amor pero a la vez destruyen ese mismo amor. O`Neill

2.- Los celos y el amor

En artículos anteriores hemos hablado del amor como un cóctel lleno de preciosos y saludables ingredientes: pasión, deseo, chispa, complicidad, admiración, ternura, seducción, respeto, misterio, afecto, juego erótico, humor, fidelidad, tolerancia, comunicación... y todos los que queráis añadir; pero ¿creéis que los celos han de formar parte del cóctel?

La Real Academia de la Lengua (RAE) habla de celo amoroso y sentimental:

1. Recelo que alguien siente de que cualquier afecto o bien que disfrute o pretenda llegue a ser alcanzado por otro

2.Sospecha, inquietud y recelo de que la persona amada haya mudado o mude su cariño, poniéndolo en otra

Albert Ellis define los celos como: una respuesta emocional compleja y perturbadora, que surge cuando una persona percibe una amenaza hacia algo que considera como propio. Comúnmente se denomina así a la sospecha o inquietud ante la posibilidad de que la persona amada nos reste atención en favor de otra.

Pero, ¿por qué somos celosos o por qué alguna situación nos provoca celos?; se barajan diversas interpretaciones y lecturas, que nosotros hemos bautizado con el nombre de Círculo Celoso, el cuál básicamente dice que hay una predisposición celosa genética que se va moldeando por la biografía familiar y relacional y queda modulada por el ambiente y la cultura donde se vive.

La genética, la biografía familiar y personal, la dinámica relacional y los factores ambientales son los elementos base sobre los que asienta la personalidad celosa. En definitiva, hay factores predisponentes y algún factor desencadenante.

Los celos se componen de tres elementos esenciales: posesividad, miedo a la pérdida y sospecha/certeza de un rival.

Provocan en la persona celosa reacciones físicas y emocionales diversas y molestas: nudo en el estómago, nerviosismo, pérdida de apetito, trastornos del sueño, sentimientos de tristeza, dolor, rabia, ira, envidia, miedo, enfado, infravaloración... Y conviene recordar que en más de un 70% los celos se relacionan a casos de violencia doméstica y de género.

Según Freud, padre del psicoanálisis: los celos son universales, no porque sean innatos sino porque son inevitables, nadie puede escapar a ellos porque se originan en dolorosas experiencias infantiles que todos compartimos; por ello todo el mundo los experimenta y son normales. Sin ánimo de corregir a Freud, nosotros estamos en la línea de considerar que aunque son muy habituales y se dan en muchas culturas, no son universales; hay algunas personas que no han sentido ni sentirán celos nunca.

Los celos, no obstante, también tienen un componente madurativo, es decir, son razonables los celos infantiles y juveniles porque en estas edades el sentido de propiedad y los desajustes con el propio cuerpo ocasionan cierta inseguridad y temor.

De una manera simplificada hablaríamos de dos tipos de celos:

1.Razonables o moderados: Son aquellos celos motivados por decepciones previas, personalidad "seductora" de la pareja, crisis de autoestima, miedo lógico a perder lo que más se desea; se basan en realidades o imaginaciones.

2.No razonables e incontrolables: Son aquellos celos que se alimentan de ideas o creencias insensatas (Ej: Me has de prometer que me quieres y que siempre me querrás, Si sales conmigo no puede gustarte ni debes mirar a ninguna otra persona, No te pongas esa ropa porque te van a mirar).

Los celos hacen que la persona que los sufre se sienta frágil, insegura y temerosa; ello hace que la pareja entre en el peligroso juego de los celos: que consiste básicamente en que: la persona no celosa evita comentar hechos o inventa situaciones para evitar malos entendidos ante la pareja celosa y que finalmente acaban provocando más problemas. Es decir, uno hace cosas para evitar problemas, y esas cosas acaban siendo el problema. El juego de los celos incluye además otras reglas muy perversas para la relación: controlar a la pareja, mirar su móvil, leer los emails que recibe, seguirle... que lejos de aliviar la situación la empeora.

Los celos son la enfermedad que mayor dolor y malestar ocasiona en las relaciones de pareja: al celoso le genera miedo, infelicidad y angustia y al no celoso le genera desencanto y desamor. Y nuestra experiencia profesional dice que los celos entre parejas del mismo sexo son más acusados y frecuentes aunque de menos repercusión para la viabilidad de la pareja.

3.- ¿Qué piensan los jóvenes acerca del amor y los celos?

En un trabajo de campo realizado con jóvenes de 15 y 16 años (300 alumnos de 4º ESO y 1º Bachillerato en el curso 2010-2011) nos expusieron su opinión acerca de esta pregunta: ¿son los celos síntoma de amor?; las conclusiones fueron parecidas en chicos y chicas, aunque con pequeños matices:

  • Un 50% de chicos y chicas decían que los celos SÍ son síntomas de amor; y hablaban de estos motivos: demuestra que al otro le importas, significa que lo/a quieres, porque demuestra el miedo que tienes a perderla...
  • Un 25% de chicos y chicas decían que los celos SÍ son a medias síntomas de amor; y hablaban de estos motivos: en su justa medida, demuestra que te quiere pero sin pasarse, demuestra que tu pareja te quiere y no quiere que te vayas con otra...
  • Un 25% de chicos y chicas decían que los celos NO son síntoma de amor; y hablaban de estos motivos: es desconfiar de la persona que quieres, porque pueden llevar a la obsesión, si no confías es que no la amas...

4.- ¿Los celos tienen sexo?

La manera de vivir los celos depende de la edad; no hablamos de lo mismo cuando hablamos de celos juveniles, de celos infantiles, celos adultos y celos de muy mayores; en este capítulo nos moveremos en el terreno juvenil-adulto joven.

De un modo genérico se observa que los jóvenes celosos suelen reaccionar con rabia, ira, y en ocasiones, con agresividad; la respuesta de las chicas suele ser tristeza y depresión. Los chicos celosos suelen sufrir más por todo lo relacionado con el ámbito y peligro erótico; es decir, responden a pautas que preserven su autoestima y hombría. Frases de su pareja como: ese tío está muy bueno, mi ex era un cerdo pero besaba y acariciaba muy bien, puede crearle problemas.

Las chicas celosas suelen sufrir más cuando entran en juego los sentimientos y emociones; es decir, responden a pautas que preserven la relación. Frases de su pareja como: esa chica es muy simpática y divertida, puede ser un acontecimiento problemático.

Añadir que los ex siempre suelen sentirse como un peligro, siendo causa de numerosas discusiones y respuestas celotípicas; pero los hombres suelen tener miedo a que su novia acabe de nuevo en la cama del ex, y los miedos de las mujeres en cambio suelen apuntar más a que su pareja se vuelva a enamorar de su antigua novia.

5.- Beneficios de los celos

Aunque los celos extremos e incontrolados son perjudiciales para la persona y la relación, hay ocasiones en que ciertas dosis de celos pueden ser útiles, en concreto: cierto nivel de celos puede incrementar el deseo sexual, hacen que examinemos nuestra relación, enseñan a las personas a no dar por hecho el amor del otro, en dosis moderadas, a veces, dan emoción a la relación; agregan pasión al juego erótico...

6.- ¿Cómo dejar de ser celoso?

Creemos que los celos no son síntoma de amor, aunque entendemos cierto nivel razonable de celos en determinados momentos evolutivos y cierto tipo de relación de pareja en la cual pueda haber un componente de personalidad seductora.

Para no ser celoso lo fundamental es:

  • Reconocerse como celoso y seguir siendo celoso, pero que los celos no limiten ni coarten la libertad del otro, es decir, podemos decir a la pareja: sufro mucho cuando te veo hablando con otro/a, para expresar mis emociones, pero sin que esto haga que tu pareja deje de hablar con otras personas.
  • Asumir la responsabilidad de ser celoso para gestionar mejor los celos y darse cuenta de que si tu pareja ha tomado la decisión de estar contigo (pudiendo no estar contigo), es porque para él/ella eres más importante y valioso que tus rivales.
  • Reflexionar sobre ¿cómo suelo gestionar mis ataques de celos?: hablando, llorando, aceptándolo, insultando, agrediendo, ignorando, escapándome, ironizando....
  • Hablar desde los sentimientos, es decir, no es mi pareja la que hace o no hace tal cosa, soy yo cómo me siento ante los comportamientos de mi pareja.
  • Es bueno y práctico asumir que los celos son un sentimiento natural y humano y que sentimos celos al igual que sentimos alegría, tristeza, enfado o amor, y lo que tenemos que hacer es aprender a gestionarlos y conviviendo mejor con ellos.

Desde la Asesoría te invitamos a que acudas y trataremos de ayudarte a gestionar lo que sientes por tus celos y lo que haces con tus celos; en definitiva, trataremos que los gestiones mejor y que veas el lado positivo de los mismos.

Santiago Frago y Silberio Sáez
Asesoría sexológica del CIPAJ y la Universidad de Zaragoza

Información actualizada en octubre de 2011

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