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En la sesión que ha celebrado esta mañana, el Consejo de Gerencia de Urbanismo ha aprobado la concesión de licencias de obra nueva para la construcción de 230 viviendas, todas ellas ubicadas en distintas zonas de la ciudad consolidada. Con ello, en lo que va de año, desde Urbanismo se han concedido licencias para la construcción de 481 viviendas, con lo que esta actividad se mantiene en parámetros similares a los de los últimos años.
Concretamente, el pasado ejercicio de 2016 se materializó un ligero ascenso en la solicitud de licencias de obras mayores (la mayoría vivienda de nueva construcción), que pasó de 525 en 2014, 1.040 en 2015 a 1.334 en 2016. A pesar de este aumento, las cifras se encuentran muy lejos de las casi 6.000 licencias para viviendas nuevas al año que se concedían en los años previos al estallido de la crisis inmobiliaria (4.737 viviendas en 2007). En este sentido, se constata la tendencia de ligera recuperación de este sector de la actividad económica, al tiempo que se van colmatando con obra nueva o rehabilitación los vacíos urbanos de la ciudad consolidada.
Por otro lado, también se han concedido 27 licencias urbanísticas y ambientales de actividad solicitadas por otras tantas entidades y empresas, entre ellas la de un nuevo supermercado en la Ronda Ibón de Plan. Con ello, se incide también la tendencia de ligero repunte de la actividad económica en la ciudad que, al igual que en el caso de las licencias para nuevas viviendas, se había recogido en la memoria de gestión del Área de Urbanismo del pasado ejercicio 2016.
Reformas de viviendas y obras menores
En cuanto a las solicitudes de licencias para la reforma de viviendas y de elementos comunes de las mismas, los datos también inciden en la misma tendencia de ligera recuperación de la actividad económica. Así pues, en 2014 se realizaron 712 solicitudes; en 2015, se presentaron 707 solicitudes, en 2016 se pidieron 810 permisos de este tipo, y, hasta el pasado 30 de abril de 2017, se han presentado 304 solicitudes.
Las obras menores, por su parte, también ofrecen en sus datos un aumento sostenido: en 2014 se solicitaron 9.854 licencias; en 2015, dieron 11.315 solicitudes; en 2016, la cifra ascendió hasta 12.747 solicitudes, y en lo que llevamos de 2017, hasta el 30 de abril, se han solicitado 4.430 licencias.
Finalmente, en cuanto a la valoración del número de solicitudes urbanísticas de actividad (licencias, declaraciones responsables y comunicaciones previas), en 2016 alcanzaron la cifra de 3.564, lo que supone un ligero aumento respecto a 2015, en que ascendieron a 3.413, y superior a la cifra de 2014, que fue de 3.234. Hasta el 30 de abril de este año, el número de solicitudes ha sido de 1.013. Estos datos están referidos a solicitudes de apertura de actividades clasificadas y no clasificadas, actividades sometidas a la normativa de espectáculos públicos y a inicio de actividad y funcionamiento.
Impacto positivo en la actividad económica de la ciudad
Todos estos datos indican, como consecuencia, un impacto positivo en la actividad económica de la ciudad,con su consiguiente repercusión en la generación de empleo, en los tributos municipales y en la gestión administrativa. Así, pues, los ingresos por tasas de licencias urbanísticas ascendieron el pasado año 2016 de 3.189.172 euros, cuando en el año 2015 fueron de 2.242.375 euros, y en 2014 de 1.989.210 euros. Todo ello se traduce también en un incremento de los derechos reconocidos del Impuesto de Construcciones y Obras (ICIO), que gravan el 4% del presupuesto de ejecución, que en 2014 fue de 6.961.263 euros; en 2015 ascendió a 9.185.222 euros, y en 2016 ascendió a 9.926.127 euros.