Como hace calor y apetece refrescarse, nada mejor que hacerlo con la primera fuente ornamental de Zaragoza

Esta primera fuente urbana monumental fue la Fuente de la Princesa, que era conocida también como de Neptuno. La situaron en la plaza más céntrica y principal: la de San Francisco o de San Fernando, que ambas denominaciones tuvo, en lo que es hoy la Plaza de España.

La figura de Neptuno, en pie con su tridente, preside el conjunto, mientras el agua mana sobre el vaso de la fuente por las bocas de cuatro delfines. Para la imagen del dios de los mares, el escultor Tomás Llovet ,se inspiró en la Fuente de Neptuno del Paseo del Prado de Madrid.

La primera piedra se colocó 14 de octubre de 1833 en conmemoración del juramento como princesa heredera, de ahí su nombre, de la futura Isabel II. Las aguas, que se traían del Canal Imperial, llegaron en julio de 1845. Cumplío su función de abastecimiento de agua desde 1845 hasta 1902, año en la que se desmontó para ser sustituida por el Monumento a los Mártires de la Religión y de la Patria. Tras diversos avatares, su emplazamiento actual está en el Parque José Antonio Labordeta

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