18 marzo 2015

La carrera del Gancho de Zaragoza, destacada en la Cumbre Internacional de Cultura y Ciudades Sostenibles

Se ha destacado la ejemplaridad de este proyecto como "buena práctica cultural", "plenamente coherente" con la Agenda 21 de la cultura, por ser una iniciativa de dinamización de un barrio que otorga el protagonismo principal a agentes culturales y de la ciudadanía

La iniciativa cultural de la "Carrera del Gancho" ha sido destacada en la Cumbre de Cultura y Ciudades Sostenibles CGLU (Ciudades y gobiernos locales unidos), que se celebra desde hoy y hasta el viernes en Bilbao.

El Consejero de Cultura, Jerónimo Blasco, ha asistido esta mañana a este encuentro internacional para explicar este proyecto en profundidad.

Zaragoza ha sido invitada a la Cumbre tras haber sido seleccionada, entre numerosos candidatos, como finalista por el jurado del Premio Internacional CGLU-Ciudad de México-Cultura 21.

Para el jurado de este prestigioso galardón la Carrera del Gancho, que se organiza desde 2004, es un ejemplo de "buena práctica cultural". Una iniciativa de dinamización de un barrio que otorga el protagonismo principal a agentes culturales y de la ciudadanía, lo que la hace "plenamente coherente" con la filosofía y criterios de la Agenda 21 de la cultura.

El Premio Internacional CGLU-Ciudad de México-Cultura 21 se refirió a Zaragoza como ejemplo de "una gobernanza cultural avanzada". En concreto detalló:

El Jurado destaca la el ejemplaridad del proyecto "La Carrera del Gancho 2004-2014 - La fiesta, motor del proceso de dinamización de un barrio" presentado por el ayuntamiento de Zaragoza (Aragón, España). Este proyecto explica con detalle las políticas culturales de la ciudad y su evolución hacia un mayor "protagonismo a los agentes culturales y a la ciudadanía, en la gestión y toma de decisiones", plenamente coherentes con la Agenda 21 de la cultura. Zaragoza ejemplifica una gobernanza cultural avanzada, pues en la última década el Ayuntamiento ha ido abandonando paulatinamente su rol de "productor" de iniciativas para convertirse en catalizador de las propuestas surgidas desde el propio sector. En este contexto, "la Carrera del Gancho" es una acción emblemática: es un itinerario de trabajo que activa la participación activa en cultura durante todo el año de un barrio entero, ha devuelto la autoestima y el orgullo a un barrio degradado que deviene un territorio intercultural, abierto, de convivencia, tolerancia y respeto. El proyecto destaca también por su utilización del espacio público, por sus múltiples partenariados, por su originalidad y por su carácter innovador. El Jurado solicita a la Comisión de cultura de CGLU que difunda este proyecto como una práctica ejemplar.

La Carrera del Gancho («carrera» significa «calle» en aragonés) es una fiesta popular protagonizada por todo un barrio, sus vecinos, comerciantes, entidades, profesionales...; una muestra creativa para poner en valor el barrio del Gancho. Numerosos colectivos de la ciudad trabajan en los preparativos de esta gran fiesta de las artes en la Calle que promueve la convivencia intercultural y la cohesión social en el Casco Histórico de Zaragoza.

La Carrera nace en 2004 motivada por la necesidad urgente de paliar graves carencias sociales a través de la Fiesta popular, participativa, integradora, sostenible y sin normas establecidas; desde la intuición y la experiencia acumulada en las sucesivas ediciones. Para La Carrera la resolución de problemas cotidianos y reales ha sido y es objetivo para concienciar y aislar el conflicto, incentivando la participación.

Así, esta iniciativa siempre ha contado con un objetivo claro: promover un proceso integral dirigido a mejorar el territorio, su habitabilidad, la convivencia y la interrelación entre personas y a construir, preservar y defender su identidad, propiciando una nueva cultura de la participación. Y conseguirlo en el marco más natural, y reconocible: la fiesta en la calle. En definitiva, generar un contexto de revitalización territorial desde el que los habitantes puedan buscar su crecimiento individual y colectivo, mejorando su autoestima y el orgullo de pertenencia al barrio.