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Zaragoza, lunes, 7 de julio de 2014.-

El cementerio de Casetas dispone de 120 nuevos nichos, que han entrado ya en servicio y que responden a la demanda que se había generado en este barrio rural de Zaragoza. Los nuevos enterramientos se han levantado en la zona sur del recinto funerario y, aunque se han adaptado al entorno, tienen personalidad propia. Uno de los elementos más característicos tiene que ver con un porche que se ha creado en la fachada central y que define una plaza entre el nuevo edificio y el cerramiento del cementerio.
El nuevo edificio de nichos, levantado por la empresa Construcciones Pellicer SA. ha necesitado una inversión de 57.500 euros y resuelve la falta de unidades de enterramientos en el cementerio municipal de este barrio rural de Zaragoza. En tres meses, el Ayuntamiento de Zaragoza ha sido capaz de resolver la demanda, utilizando una parcela que se encuentra al sur del cementerio de Casetas. La nueva construcción, diseñada por el servicio de Arquitectura, consigue una integración arquitectónica con los sobrios bloques de nichos preexistentes, pero con una imagen propia, y con una factura realizada con materiales modernos. La principal seña identidad de este nuevo equipamiento está definida por una plaza que se configura entre la fachada principal y el cerramiento del cementerio.

El concejal de Cementerios, Laureano Garín, destacó "el esfuerzo que se ha hecho para atender a una necesidad concreta, y el trabajo constante y mantenido por dignificar todos los cementerios municipales".
Los nuevos nichos se han realizado con prefabricados de hormigón, que resuelven en menor tiempo la construcción de este tipo de equipamientos, componiendo una manzana independiente. La fachada principal de este nuevo bloque se orienta hacia la calle San Jorge, que es la conexión natural con el barrio, y en ella se ubican 30 de los nuevos nichos. Los otros 90 se reparten a partes iguales en cada una de las calles laterales que forma el nuevo edificio y que se enfrentan a otros bloques de construcción anterior.
La cubierta, inclinada de teja plana en color marrón claro y con un canalón perimetral, presenta unos aleros generosos de 85 cm, que protegen las fachadas y los propios nichos de las inclemencias meteorológicas, así como el porche, de 2,3 metros de profundidad. Este elemento se ha diseñado con dos pilares extremos que logran dibujar una pequeña plaza en el cementerio.
El hormigón y el acero son los materiales que predominan en este nuevo equipamiento, así como los colores gris y blanco, que predominan en todo el recinto, salvo en el arco que enmarca la entrada, que es de tono rojizo.
Además, el Ayuntamiento de Zaragoza dotará de una nueva puerta de forja a la entrada lateral, que tendrá dos hojas, aunque será más sencilla que la principal.
El cementerio de Casetas se ubica en la zona sur del barrio, junto a los campos de fútbol, y se encuentra conectado con el núcleo urbano a través de la calle San Jorge. La planta de este cementerio, que data de 1.900, es cuadrada y está distribuida en una retículas de seis partes, tres de ellas ocupadas por tumbas y otras tres con edificios para nichos.