20 octubre 2017

El Ayuntamiento de Zaragoza presenta alegaciones al Plan GIRA de la DGA

El Consejero Alberto Cubero ha alertado de la posibilidad de un nuevo "ICA" de los residuos para que los vecinos y vecinas de Zaragoza asuman el coste de inversiones necesarias en otros municipios de Aragón


El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado una serie de alegaciones al PLAN GIRA que ha elaborado el Gobierno de Aragón con objeto de mejorar su redacción, realizar propuestas y que se tengan en cuenta los intereses de Zaragoza. De las alegaciones presentadas por el consistorio, el Consejero de Servicios Públicos y Personal, Alberto Cubero, ha destacado dos de ellas.

Alegaciones a la implantación de un impuesto ambiental a las EELL que limiten la gestión final de los residuos domésticos a su depósito en vertedero.

En el documento autonómico se habla de la posibilidad de que en 2020 todavía queden EELL que limiten la gestión final de los residuos domésticos a su depósito en vertedero por lo que se propone establecer un impuesto ambiental a las mismas. Sin embargo, en la alegación municipal, se recuerda que según Decreto 1481/2001 "sólo podrán depositarse en vertedero residuos que hayan sido objeto de algún tratamiento previo". Por ello, no procede establecer ningún tipo de impuesto sobre una actividad que es ilegal y lo que procede es sancionar a aquellas EELL que no están cumpliendo con la legislación.

Alegaciones a la implantación de un canon o impuesto ambiental sobre las operaciones de eliminación de residuos, tanto mediante incineración como especialmente mediante depósito en vertedero

Sobre este impuesto que se propone es difícil hacer una valoración puesto que es necesario que se especifique más. Sin embargo, desde el Ayuntamiento se realizan las siguientes recomendaciones sobre las características que debería tener este impuesto:

Debería tener un carácter progresivo en función de la cantidad de residuos depositada en vertedero.

El dinero recaudado debe revertir en la misma proporción en las entidades locales que lo han tenido que aportar con la obligación de invertirlo en la mejora de la gestión de residuos.

La financiación de la gestión que puedan hacer las EELL como fruto de la recaudación se entiende debería destinarse a mejorar los flujos que disminuyan las operaciones jerárquicamente superiores al vertido, como pueden ser ayudas para el uso de la materia bioestabilizada y el compost. Se considera que otras acciones, como sellados de vertederos, que no incrementen directamente los porcentajes necesarios para alcanzar los objetivos planteados en la legislación vigente deben quedar fuera del destino de la recaudación.

Para el Consejero de Servicios Públicos y Personal, Alberto Cubero, el nuevo impuesto ambiental sobre las operaciones de eliminación de residuos "podría ser un nuevo ICA si la DGA está pensando en que el destino del dinero recaudado sea financiar el sellado de los vertederos ilegales. Desde el Gobierno de Zaragoza vamos a defender que el impuesto sea progresivo, quien más contamina más paga, y que lo recaudado revierta en quien lo paga en forma de inversiones para la mejora de la gestión de residuos. No puede ser que si Zaragoza estamos realizando inversiones, en su momento el CTRUZ o ahora la implantación de materia orgánica, tengamos que pagar también las inversiones de las entidades locales que no han hecho nada hasta ahora".