29 julio 2014

El Ecovertedero contará con un centro de I+D+i pionero en Europa

El Gobierno da luz verde a la construcción de las instalaciones, fruto de un convenio entre Urbaser y el Ayuntamiento.

La inversión prevista es de 1,2 millones de euros y supondrá la creación de 6 puestos de trabajo.

En su reunión de hoy, el Gobierno ha dado luz verde al proyecto de construcción del nuevo Centro de Innovación Tecnológica de Residuos en las instalaciones del Centro de Tratamiento de Residuos de Zaragoza (CTRUZ).

Como se recordará, el pasado mes de diciembre se firmó en el Ayuntamiento de Zaragoza un Convenio de Colaboración con la empresa URBASER, empresa que gestiona el CTRUZ dentro de la UTE Ebro, por el cual se instalará en Zaragoza su Centro de Innovación Tecnológica de Residuos. En estas instalaciones se llevarán a cabo las tareas de I+D+i encaminadas a mejorar la gestión de los residuos. El objetivo es dicho centro sea una referencia para el desarrollo de las tecnologías medioambientales.

Gracias a este acuerdo, el Centro de Tratamiento de Residuos de Zaragoza (CTRUZ), conocido también como Ecovertedero, se convertirá en un referente nacional e internacional en I+D-i en el ámbito de la gestión y recuperación de residuos.

El Convenio fue firmado por el Alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, y el presidente de URBASER, José María López Piñol, junto a la Consejera de Servicios Públicos y Movilidad, Carmen Dueso.
URBASER centralizará en las futuras instalaciones de Zaragoza sus labores de I+D+i, aprovechando para ello espacio disponible dentro del propio Ecovertedero y sin afectar, en ningún modo, al funcionamiento normal de sus instalaciones. La inversión prevista supera los 1,2 millones de euros, que serán sufragados íntegramente por la empresa. Una vez en marcha, se generarán 6 nuevos puestos de trabajo cualificados.

Este Centro será el primero de estas características en España y permitirá situar a Zaragoza en la vanguardia de las tecnologías en gestión de residuos a nivel internacional, así como en sus aplicaciones para la producción de energía y combustibles sólidos recuperados a partir de los residuos, con los consiguientes beneficios en cuanto a la reducción e gases de efecto invernadero y la lucha contra el cambio climático.