El 37,8 por 100 de los viajes de más de cinco minutos de duración que se realizan en Zaragoza, por sus habitantes, se efectúan a pie y, sin embargo, al igual que en otras muchas ciudades, parece como si esta demanda fuese la que menos atención merezca. Desde la perspectiva de una adecuada satisfacción de las necesidades de la demanda es importante, en nuestra opinión, que el peatón recupere el espacio urbano, que sus desplazamientos puedan realizarse con comodidad y, si es posible, de una manera agradable; sería deseable recuperar la calle para los peatones, para que la vida pueda discurrir en ella con las menores interferencias del tráfico rodado. Cuando en otras capitales se han abordado actuaciones de este tipo, siempre se han producido resistencias iniciales, especialmente por parte del comercio, pero, sin excepción, han sido los opositores del principio los mayores defensores de medidas de peatonalización. Por todo ello, con el horizonte del año 2016, se han abordado la selección y definición de tres tipos de propuestas:
Todo ello engarzado con la planificación de carriles bus y sólo bus, con la construcción de la línea de tranvía o metro ligero y con la red de bicicletas.