03 septiembre 2018

El alumnado de la Escuela Infantil Pirineos será recolocado en otros centros municipales mientras se repara la cubierta del edificio

 La techumbre se vio muy afectada por la tormenta del pasado 12 de agosto, y dado que los análisis han detectado la presencia de amianto en los materiales con que fue construida, es necesario seguir el protocolo específico de desmontaje y gestión de residuos para estos casos antes de instalar la nueva

 Los 66 niños y niñas matriculados en la Escuela Infantil Pirineos serán recolocados en otras escuelas infantiles municipales durante este curso 2018-19, mientras se llevan a cabo los trabajos de desmontaje, gestión de residuos y reconstrucción de la cubierta del edificio, que se vio muy afectada por la tormenta del pasado día 12 de agosto, con vientos de casi 110 kilómetros por hora que arrancaron una parte importante de dicha cubierta.

La concejala delegada de Educación e Inclusión, Arantza Gracia, junto con los responsables del Patronato Municipal de Educación y Bibliotecas, se ha reunido hoy con los padres y madres afectados, a quienes se les ha expuesto la situación y se les ha informado de que el alumnado de la escuela será escolarizado en su totalidad, siendo recolocado en otras escuelas infantiles municipales, la mayoría de ellos en la nueva instalación del Parque Bruil, una de las más cercanas a la Escuela Infantil Pirineos.

Con ello, se va a solucionar el principal problema que se había producido como consecuencia de los destrozos ocasionados por la tormenta en la cubierta de la escuela, con zonas externas del patio y del jardín dañadas por la caída de cascotes, ya que la prioridad de la Concejalía, en este caso, es atender a las familias que se han visto afectadas por el obligado cierre temporal de esta escuela municipal.

  • Esta situación afecta a las 66 familias que matricularon a sus hijos en dicha escuela (7entre 0 y 1 año, 23 entre 1 y 2 años, 36 de 2 a 3 años). Concretamente, la propuesta que se ha trasladado a las familias es la siguiente:
  • Escolarizar a los más pequeños (0 a 1 año) en la Escuela Infantil Villacampa, próxima a la de Pirineos.
  • Escolarizar las 2 aulas de 1 a 2 años y las 2 aulas de 2 a 3 años en la Escuela del Parque Bruil.
  • Ofrecer prioritariamente a estas familias la posibilidad de escolarización en otros centros dónde existan plazas vacantes.
  • El servicio de comedor funcionara según lo previsto, comenzando el día 13 de septiembre.

Desde el Patronato de Educación se les ha trasladado a las familias una propuesta idónea y rápida para el desarrollo de este servicio público, en las mismas condiciones a las previstas y con todos los requisitos legales y las autorizaciones administrativas que exige la normativa vigente, y sin menoscabo de la calidad del servicio prevista. Estas condiciones se mantendrán durante el tiempo que duren las obras, manteniéndose, si fuese necesario, durante todo el curso escolar.

Nueva cubierta metálica

El Servicio de Conservación de Arquitectura del Ayuntamiento, encargado del mantenimiento de los edificios y equipamientos municipales, se hizo cargo de la situación desde el primer momento tras la tormenta del pasado 12 de agosto, y ha proyectado su reconstrucción en chapa metálica para evitar en el futuro problemas como el que se ha producido en esta ocasión.

Dado que la cubierta de la Escuela Infantil Pirineos se construyó hace 46 años en fibrocemento granonda sobre viguetas de hormigón empotradas en los muretes de ladrillo, como primera providencia se mandaron muestras del material desprendido a un laboratorio especializado, que, tras su análisis, ha confirmado al Ayuntamiento la presencia de amianto en su composición, tal como sospechaban los técnicos municipales.

Como consecuencia de ello, es necesario poner en marcha el protocolo que marca la normativa en materia de seguridad y salud que se debe aplicar en los trabajos con riesgo de exposición al amianto, lo que implica la elaboración de un plan de actuación que debe aprobar el Gobierno de Aragón, y la realización de los trabajos por parte de una empresa especializada y de un gestor de residuos homologado para estos casos.

Todo ello conlleva una importante dilación temporal de las obras, ya que el plazo de autorización, tras la presentación formal de la solicitud, es de 45 días, a los que hay que añadir que el desarrollo de los trabajos de desmontaje y de tratamiento de los residuos es bastante más laborioso y complejo que los de una obra normal.

En consecuencia, los servicios municipales de conservación de Arquitectura, estiman que los trabajos de construcción de la nueva cubierta de la Escuela Infantil Pirineos podrían finalizarse en los primeros meses del próximo año.

Finalmente, hay que señalar que, mientras la cubierta actual ha estado operativa, no se ha producido ningún riesgo para los menores que han estado escolarizados en este centro ni para el personal que ha trabajado en la escuela, ya que con este tipo de materiales, el riesgo de exposición al amianto únicamente se produce mientras se manipula, es decir, en el montaje y en el desmontaje.

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