13 julio 2017

Aparece un tramo de la Muralla Romana en el Coso junto a la Plaza de la Magdalena

Se trata de un lienzo de 4,75 metros de largo y una altura de 2,3 metros distribuidos en cuatro hiladas, que corresponde al parámetro exterior de la torre de la muralla
Este importante hallazgo se ha producido gracias al impulso, desde el área de cultura, a los trabajos de investigación sobre el conjunto de este monumento arqueológico de la ciudad

El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha presentado hoy los restos del torreón de la muralla romana de Zaragoza que han sido localizados en el número 147 del Coso en el sótano de un edificio particular, junto a la Plaza de la Magdalena.

"El hallazgo es fruto de la búsqueda de vestigios de Caesaraugusta encargado por el Ayuntamiento para diseñar un Plan Director de protección de restos romanos visibles e invisible"  -ha señalado el alcalde- "Trabajaremos ahora para ver como hacemos para que pueda ser accesible a todos los ciudadanos y ciudadanas y a la vez relacionarlo con el resto de vestigios de nuestro pasado que conserva la ciudad".

En la visita a estos restos arqueológicos el alcalde ha estado acompañado por el Consejero de Economía y Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, responsable del área de Cultura y en concreto el arqueólogo municipal Francisco Escudero, que ha llevado a cabo los trabajos de investigación que han permitido este descubrimiento.

Una parte del torreón exterior en buen estado de conservación

El vestigio que hoy se ha presentado es un muro de sillares descubierto en los sótanos del inmueble número 147 del Coso, esquina con la plaza de la Magdalena y cercano a la derribada puerta o arco de Valencia.

Forma parte del Torreón Exterior, datado en la segunda mitad del siglo III o comienzos del IV. Esta casa corresponde a los números 151 y 153 en el parcelario de Casañal de 1911, una vez reunificados por el proyecto del arquitecto Félix Navarro.
El hallazgo más novedoso corresponde al número 151, un sótano que en estos momentos es un local comercial de titularidad particular utilizado como zona de almacén. Su extensión es prácticamente la de la totalidad de la planta rectangular: 62 metros cuadrados. Se trata de una gran parte del muro norte, y corresponde al arranque sur de la torre: 4.75 m lineales de lienzo.

Cubre 2.3 m de altura, que se distribuye en cuatro hiladas, de 0.61 m, 0.6 m, 0.48 m y 0.6 m (de abajo a arriba), y otra -posiblemente la primera- de la que solo se ve su plano superior enrasado con el suelo del sótano. Entre las hiladas inferiores de las torres se perciben también tres escalonamientos.

Hay varios sillares que muestran abombamiento en buena parte de la cara expuesta. A pesar del habitual desgaste de la arenisca ¿que es el tipo de piedra de los sillares¿, de la existencia de algunos morteros modernos y de algún entalle para el calce de las vigas, el conjunto se encuentra en un buen estado de conservación.



Se confirma la parte interior del Torreón de la que ya se tenía constancia

En el sótano del antiguo inmueble del número 153 se ha confirmado la existencia de la parte interior de este hallazgo, de la que se tenía constancia por parte de algunos expertos, pero que estaba sin catalogar ni documentar.

Ahora se sabe que ocupa una superficie de construcción de unos 61 metros cuadrados. El estado de conservación de la parte interior de este torreón es bueno también pero ahora mismo necesitará una importante labor de limpieza porque parte está cubierto de algún tabique y estructura accesoria ya que ocupa el almacén de un bar.