Dejando la tierra es el título de esta bellísima escultura de 1905 del escultor Enrique Clarasó. Realizada en mármol de Carrara es una representación plástica del alma en su ascensión al cielo como una figura de mujer joven desmayada, desnuda y cubierta por transparente mortaja que deja traslucir sus sensuales formas femeninas.